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Diciembre de mis recuerdos

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Tú que estás lejos de tus amigos de tu tierra y de tu hogar y tienes pena, pena en el alma porqué no dejas de pensar. Tú que esta noche no puedes dejar de recordar, quiero que sepas que aquí en mi mesa para Ti tengo un lugar. En aquellos diciembres de mi niñez, las primas recorríamos la casa entera de los tíos inventando juegos y descubriendo secretos empacados en papel de regalo. A medida que iban llegando, otros miembros de la familia colocaban sus obsequios al pie del árbol de Navidad para deleite de nosotras que llenas de curiosidad no queríamos perder ningún detalle. La tele con su imagen en blanco y negro, interrumpía de vez en cuando nuestros juegos para alegrar el ambiente con algún comercial de moda que cantábamos de memoria: En el nuevo año venidero, se lo deseamos placentero, saboreando la vida por entero...  Los primos varones se entretenían afuera en la calle, aprovechando la fumadera de "los grandes" que entre tragos, boquitas y música

En el éxodo de mi nostalgia

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Cuando me fuí, doblé cuidadosamente el cielo y las estrellas; no fuera yo a perderlos. Recogí los maizales y el trigo para llevarlos conmigo, Ahuequé en mis manos la tristeza y mansedumbre de mi hermano indio, de mi hermano maestizo, para no olvidarlos. Pinté en mis ojos, el eterno paisaje de mis lagos, volcanes, madroños, sacuanjoches... Me retraté en ellos y con ellos y en las pupilas me llevé las fotos. Corté el dolor de los malinches florecidos y en la valija del alma acomodé inmediatamente mi nostalgia...inmediata. Carlota Molieri En el éxodo de mi nostalgia de su libro Ceremonial de luces Fotografia: Roberto Zuniga

Y nicaragua canta en mi

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Nada canta en nosotros sino lo que amamos Nada acaba de ser en nosotros sino lo que -del modo que sea- cantamos Nada llega a hacérsenos canto, si antes -del modo que sea- no nos ha amado Todo lo cual quiere decir que, si Nicaragua canta en mí cuando yo la canto, es que ella me amó, como yo la amo. Y Nicaragua canta en mí! - Angel Martinez Baigor ri S.J. Esta y otras fotos de Nicaragua pueden ser vistas en USLatino

La boca del infierno

Cuento escrito por Rosario Lynch      Francisco del Pino y Sarmiento, vernáculo de la vieja Madre Patria ya había atestiguado al Fraile Blas del Castillo, intentar el descenso al cráter del Volcán Santiago.      Sin poseer la bendición de los reyes ni ser represente del feudo, había llegado a estas fértiles tierras movido por su intención de convertirse en bucanero de las fragatas que poblaban los mares del Atlántico. Pero al llegar al nuevo mundo, a como muchos que en 1539 se aventuraban a navegar hasta este lejano mundo, sorteando la piratería, decidían permanecer en tierra firme, atraídos por las riquezas aquí ocultas y sus mujeres bellas. Lo último en particular le había subyugado, habían sido las indígenas, esculpidas, -a como lo describía en sus cartas- en cobre y ámbar auténticos. De ojos oblicuos y mirar escurridizos, de rizos como las noches oscuras sin lunas de las praderas centrales, impregnadas por las cenizas sulfurosas del volcán.

Extraños sucesos en la Casa del Coronel Arrechavala

     La Ciudad de León Santiago de los Caballeros, es cuna de una de las leyendas más populares que por décadas ha coqueteado con la fina línea entre la imaginación y la realidad de algunos leoneses quienes en las noches oscuras y calurosas, aseguran todavía escuchar los cascos del fantasmal caballo del Coronel Arrechavala.      El español Joaquín Arrechavala había venido a Nicaragua como enviado del Rey de España, Carlos II de Borbón. En 1791 fue ascendido a Coronel, y cuando murió en 1823 se rumora que lo acompañó a la tumba la inquietud de andar penando en León, sin poder descansar en paz hasta que su riqueza hubiera sido distribuida de alguna manera.      Son muchos nicas los que aseguran que efectivamente, sus abuelos, sus padres o incluso ellos mismos han sido testigos de las andanzas del coronel y los hechos misteriosos que ocurren en la que fuera su casa.      Me contaba una señora leonesa lo que sus abuelos vivieron en carne propia: "Este cuento fue real, sucedi

Al viejo también lo queman en San Juan del Sur

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"Manuel Salvador López Pizzi, de 76 años, comentó que el 31 de diciembre muchos sanjuaneños acostumbran hacer un muñeco de trapo al que visten con ropa vieja, le colocan un puro en la boca y en ocasiones le ponen una botella de guaro. Acercándose la medianoche lo sacan por algunas calles, acompañan el recorrido con música de guitarra y en el justo momento que llega el año nuevo lo queman. Luego lo echan al mar, por el lado del muelle. Ese momento significa, para quienes lo practican, acabar con todo lo malo que el año viejo les entregó, de tal manera que esa mala suerte no regrese más en el año venidero. El muñeco es quemado con la intención de que el año nuevo pueda traer todo lo positivo que no trajo el viejo: bonanza, felicidad, dicha, amor, estabilidad económica y laboral, entre otros. " Fuente: www.laprensa.com.ni 29 de diciembre del 2002 O. Valenzuela Foto: www.morgansrock.com

La quema del Viejo (tradición de año nuevo)

     El 31 de diciembre es día de planear el primer bacanal del año, noche de estar con los amigos, y celebrar en grande. Al igual que en Navidad, se preparan cenas especiales y se quema pólvora y fuegos artificiales en las calles cuando el reloj finalmente señala la esperada media noche.      Al igual que otros países centroamericanos , Perú , Venezuela , Ecuador , y México por mencionar algunos, los nicas también tenemos la tradición, con una que otra pequeña variante, de celebrar el Año Nuevo con la famosa "Quema del viejo".      En algunas regiones del país la gente prepara muñecos que rellena con pólvora para luego sentarlos en las esquinas de los barrios o colgarlos de postes o árboles.      Pensando en su natal Matagalpa, Diana recuerda momentos especiales de su niñez: "A mí me gustaba el 31 porque se quemaba el viejo que estaba en el poste o sentado. El 'viejo' se tiene desde el 24 de diciembre y lleva adentro bombas, cohetes, cachinflines, triquit